El más completo directorio en español

HOME| Titulares| Diarios| Radios| TV.| Buscadores| Economía| Mundo| Alternativos| Archivo| Mail

 

Latinoamérica

Argentina

Norteamérica

Europa

Medio Oriente

Irak

Asia

Africa

Medios

Internet

Autores

Especiales

Archivo

TITULARES
del Mundo

I Argentina I Brasil I
I América Latina I
I España I EE.UU. I
I Canadá I Europa I
I Asia I Africa I
I Oceanía I

EN VIVO

Radios del
Mundo


I América Latina I
I España I EE.UU. I
I Canadá I Europa I
I Asia I Africa I
I Oceanía
I Medio Oriente
I Internacionales I

MEDIOS
ALTERNATIVOS


I Periódicos
 
y Redes
I
I
Agencias
 de Noticias I
I
Publicaciones
 
y Sitios I
I
Prensa
 
de Izquieda I

BUSCADORES

del Mundo


I América del Norte I
I América Central I
I América del Sur I
I Europa I España I
I Africa I Asia I
I Medio Oriente I
I Oceanía I
I Temáticos I
I Internacionales

TELEVISION

      del Mundo


I América Latina I
I España I EE.UU. I
I Canadá I Europa I
I Asia I Africa I
I Oceanía
I Medio Oriente I

ECONOMIA
MUNDIAL


I América Latina I
I Africa I Asia I
I España I EE.UU. I
I Europa I
I
Oceanía I  
I Canadá
I Medio Oriente
Bolsas del Mundo I

MEDIOS

del Mundo


I Agencias
de Noticias
I

I Diarios
I Revistas I
I Radios I
I Televisión I

 

Agregar 
a favoritos

Recomendar
 este sitio

 
 

NOTICIAS

LATINOAMERICA  

Tuesday, 22 de February de 2005

Mitos y realidades

¿A quién molesta  el gobierno de Chávez?

(IAR-Noticias)  22-Feb-05

Las peleas mediáticas entre EEUU y el gobierno de Chávez ya son un clásico de los sitios y medios periodísticos de habla hispana, y se repiten cíclicamente hasta el infinito casi como un fenómeno psicológico compulsivo. ¿Qué hay de verdad?

Para no caer en subjetivismos, vamos a plantearnos dos preguntas esenciales:  ¿En qué medida Chávez esta realizando una revolución social transformadora?, y ¿ En qué medida está enfrentando en serio al poder capitalista local y a la hegemonía de EEUU en Venezuela?

Y para respondernos vamos a acudir a una primera definición de Chávez y su gobierno realizada por el  honesto  y coherente pensador de la izquierda, James Petras, al que no se le puede atribuir el mote de "fascista" o de "contrarrevolucionario":

"Chávez está más cerca del "New Deal" de Franklin D. Roosevelt que de la revolución socialista de Castro. Tras las tres crisis políticas –el fallido golpe militar, la derrota del lock-out ejecutivo, y la derrota de la oposición en el referéndum– el presidente ha ofrecido diálogo y ha propuesto alcanzar un consenso con los principales "barones" de los medios de comunicación y los autócratas de las grandes empresas y del Gobierno estadounidense, consenso basado en las actuales relaciones de propiedad, la propiedad de los medios de comunicación y la ampliación de las relaciones con Washington".

Las preguntas a realizarse después de este párrafo esclarecedor de Petras es ¿Porqué la oligarquía -antiguamente golpista de Venezuela- conn sus próceres emblemáticos, como Hugo Cisneros, se ha quedado "quietecita" después del referendo del 14 de agosto? ¿De qué hablaron Chávez y Cisneros en su reunión antes del referendo? ¿Porqué la oposición -en control del 90% de los medios de comunicación- ha bajado ostensiblemente sus niveles de ataque a Chávez? ¿Tuvo que ver la reunión de Chávez con Cisneros, cuyas empresas y las de la oligarquía nunca fueron tocadas por el gobierno de Chávez?

¿Cómo es que Chávez se pelea con EEE o dice que Bush quiere asesinarlo, si su embajador en la OEA el 19-02-05 declaró a la agencia ABN que Venezuela se convirtió en el primer proveedor de petróleo a EEUU, por encima de Canadá, Arabia Saudita y México, que son abastecedores tradicionales?.

¿Cómo se entiende eso de negociar y entregarle el principal recurso estratégico al propio "asesino"?

Lo de Chávez no cierra por ningún lado.

En cuanto a si Chávez esta realizando una "revolución" en Venezuela", acudimos de nuevo a Petras:

"Entre la frustración de la derecha y la euforia de la izquierda, poco se ha hablado de la compleja y contradictoria realidad política venezolana y de la especificidad de las políticas del presidente Chávez. Todavía menos se ha debatido la división entre un Washington dominado por la ideología y un Wall Street pragmático, entre las políticas de confrontación y las de conciliación, y entre las convergencias y las divergencias de Venezuela y el resto de América Latina. Tanto la derecha como la izquierda han vuelto a sus respectivos mitos sobre el Gobierno bolivariano de Chávez en lugar de analizar las realidades concretas".

Luego profundiza el pensador de izquierda norteamericano:

"La derrota en el referéndum ha sido una derrota táctica importante del imperialismo estadounidense y de sus vasallos locales. Sin embargo, una derrota del imperialismo ni significa necesariamente una transformación revolucionaria, ni conduce a ella, como lo demuestran las declaraciones postelectorales de Chávez dirigidas tanto a Washington como al gran capital. Un elemento más indicativo de las políticas chavistas es el próximo acuerdo de inversión de 5.000 millones de dólares celebrado con Texaco-Mobil y Exxon para explotar los campos petrolíferos y de gas del Orinoco. La euforia de la izquierda le impide ver las oscilaciones del discurso de Chávez y del modelo heterodoxo de asistencia social y de políticas económicas neoliberales que practica constantemente".

¿Una revolución con el principal recurso estratégico de Venezuela entregado a la petroleras norteamericanas? Es como si Fidel, en 1959, hubiera tomado el poder político por medio de una revolución, dejándole el control de la estructura económica a las empresas de EEUU. ¿O acaso Chávez rompió con la lógica histórica del dominio capitalista por medio del control económico?

Acudimos de nuevo a Petras:

"El compromiso de Chávez con las políticas centristas-reformistas explica por qué no llevó ante los tribunales a los propietarios de los medios de comunicación que en su momento hicieron llamamientos al derrocamiento violento de su Gobierno, y también por qué no ha tomado medidas judiciales contra la asociación patronal Fedecámaras, que ha incitado a la rebelión militar y a realizar ataques violentos contra el orden constitucional.
En Europa, América del Norte y muchos otros lugares, unos gobiernos democráticamente elegidos hubieran arrestado y llevado ante la justicia a éstas elites por actos de subversión violenta. El presidente Chávez, en cambio, ha reiterado constantemente que sus propiedades, privilegios y riquezas no corren peligro. Además, el hecho de que estas élites hayan estado implicadas en tres intentos anticonstitucionales de derrocar al Gobierno y puedan seguir manteniendo sus posiciones de clase, muestra sin lugar a dudas que el presidente sigue pensando que dichas clases sociales tienen un papel importante que desarrollar en su visión de una asociación entre el sector público y el privado basada en el desarrollo y en un alto nivel de bienestar social. Tras cinco años gobernando y tres importantes "confrontaciones de clase" es evidente que, al menos a escala del Gobierno, no ha habido ruptura en lo que respecta a las relaciones de propiedad o de clase, como tampoco la ha habido con los acreedores extranjeros, los inversores y los clientes del petróleo venezolano".

En cuanto a la política de "transformación económica" de Chávez", sostiene Petras:

"Los programas chavistas de bienestar social atraen a millones de votantes de bajos ingresos, pero no afectan los niveles de ingreso salarial ni crean proyectos de empleo a gran escala. El desempleo sigue estando en torno al 20% y los niveles de pobreza alrededor del 50%. El gasto social generalizado ha mejorado la existencia de los pobres pero no su posición de clase. Chávez reacciona, alternativamente, de un modo combativo y radical cuando su liderazgo se encuentra en peligro, y de un modo conciliador y moderado una vez que ha conseguido superar las amenazas".

Convalidando a Petras, los cálculos de la CEPAL para el 2004 indicaban que las condiciones de vida permanecerían casi invariables en la mayoría de los países, salvo en Venezuela, donde la pobreza podría aumentar significativamente. Pero, según la CEPAL, Venezuela también registrará el mayor desempleo al cierre del 2004 con una tasa poco menor a 16%, seguida por Argentina con poco menos de 14%, Uruguay y Brasil con cerca de 12%.

¿Se puede considerar una "revolución social" a la gestión de un gobierno que después de 5 años, y contando con la renta petrolera que no disponen otros gobiernos de la región, mantiene los más  altos niveles de pobreza y desocupación? ¿Acaso Chávez y sus apologistas de izquierda consideran el "asistencialismo" como una revolución? 

Si es así, su pensamiento (el de la izquierda enamorada de Chávez) no diferiría de las posturas del Banco Mundial y del propio Washington, que quieren que los gobiernos títeres de la región construyan el capitalismo de "rostro humanizado" con los mendrugos del presupuesto que queda después de que los bancos y las transnacionales se roban los recursos estratégicos y el producido laboral de sus pueblos sumidos en el desempleo y la miseria.

En cuanto a lo que hay de realidad o de mito sobre la "confrontación" del gobierno de Chávez con EEUU, dice   Petras:

"Ni la derecha ni la izquierda han sabido reconocer las diferentes tácticas empleadas, de una parte, por un Washington dominado por la ideología y, de otra parte, por un Wall Street pragmático. La clase política estadounidense (tanto los republicanos como los demócratas, tanto la Presidencia como el Congreso) ha estado activamente implicada en las amenazas, las intervenciones y el apoyo al destructivo lock-out, en el golpe violento, y ha buscado el fraude en el referéndum, a fin de expulsar a Chávez.
Contrariamente, las principales compañías petroleras y los bancos estadounidenses y europeos han seguido manteniendo relaciones económicas estables y provechosas con el Gobierno venezolano.
Los acreedores extranjeros han recibido puntualmente unos pagos de miles de millones de dólares y no han hecho nada por interrumpir estas lucrativas transacciones.
Las principales compañías petroleras transnacionales de Estados Unidos proyectan invertir entre 5.000 millones y 20.000 millones de dólares en nuevas inversiones de exploración y explotación petrolífera. No cabe duda de que esas compañías hubieran visto con buenos ojos la victoria del golpe militar, y con ello la posibilidad de monopolizar todos los ingresos del petróleo venezolano, pero al percibir los errores de Washington están satisfechas de compartir la riqueza petrolera con el Gobierno de Chávez"
.

De acuerdo con Petras, la relación del gobierno de Chávez con EEUU se tiene que mensurar en dos niveles: 1) Wall Street, asiento del poder real del capitalismo norteamericano dominado por la "lógica pragmática de los negocios", y 2) Washington, el ala administrativa dominada por la ideología y los prejuicios jurásicos de los funcionarios ultraderechistas con Bush a la cabeza.

Esto lleva a que la relación Chavez-EEUU esté constantemente sometida a una actitud ambivalente, y casi esquizofrénica: Chávez, mediáticamente,  se "pelea" todos los días con el gobierno de Bush, pero las transnacionales, petroleras y bancos norteamericanos (representadas por el gobierno de Bush) continúan utilizando a Venezuela como un "paraíso" de sus negocios favorecidos y preservados por la administración del gobierno de Chávez.

¿Es posible que en esta situación EEUU -entendido como el poder capitalista real asentado en Wall Street- quiera invadir militarmente a Venezuela y terminar con el gobierno de Chávez? ¿Qué sentido tendría en estos momentos para el capitalismo norteamericano eliminar a Chávez? ¿A título de qué terminarían con un presidente que no hace nada diferente a sus demás empleados políticos en la región?

A Saddam en Irak, por ejemplo, le invadieron el país para controlar las reservas y la comercialización del crudo iraquí. Y a Chávez sólo lo derrocarían o lo matarían si nacionaliza el sector productivo venezolano, expulsa a los bancos y transnacionales norteamericanos, y rescinde contrato con todos los consorcios estadounidenses que dominan la estructura petrolera de Venezuela.

Mirando la "realidad" de la administración Chávez, analizada sin mitos, es probable que los "sapos vuelen" antes de que Chávez se enfrente en serio con el poder del capitalismo imperial norteamericano.

Oteando lo que se viene en el proceso venezolano, dice Petras:

"Las divergencias tácticas entre Washington y Wall Street (con respecto a Chávez) probablemente se reducirán a medida que el Gobierno de Venezuela entre en una nueva fase de conciliación con Fedecámaras y Washington. Teniendo en cuenta la derrota de Washington en el referéndum y los grandes contratos petroleros con las principales transnacionales estadounidenses, Washington buscará probablemente una "tregua" hasta que vuelvan a surgir nuevas circunstancias, más favorables".

La demagogia antimperialista

Descartada -por praxis histórica comprobatoria- la falta de voluntad política de Chávez para enfrentar en serio al capitalismo norteamericano y realizar una transformación real de la estructura económica y social de Venezuela, sólo quedan las contradicciones y emergentes que el presidente desata con su discurso antiimperialista entre la militancia bolivariana.

Salvando tiempo, distancia, y circunstancias históricas, la demagogia antiimperialista de Chávez recuerda al proceso argentino con el general Juan Domingo Perón en la década del setenta.

Perón fue derrotado por un golpe de la oligarquía militar en 1955, y durante un exilio de18 años alimentó una postura discursiva antiimperialista y anti_EEUU (parecida a la de Chávez) que captó a millones de adherentes entre la juventud argentina, incluida la de izquierda.

El general argentino, mediante libros y discursos anti-EEUU, promovió y cobijó a una militancia antiimperialista combativa que luego fue girando hacia posturas radicalizadas de lucha armada, como fue el caso de la organización Montoneros.

Pero simultáneamente (al igual que hoy hace Chávez en Venezuela) Perón daba sustento político a una burocracia partidocrática de derecha (el Partido influenciado por el "loperreguismo") enfrentada a muerte con las tendencias revolucionarias impulsadas por el mismo Perón entre la militancia peronista antiimperialista.

También el general (al igual que el coronel Chávez) anudaba acuerdos secretos con la oligarquía golpista para su "regreso en paz" a la Argentina donde le esperaba un triunfo electoral abrumante.

La primera confrontación armada entre ambos sectores (la derecha con la militancia de izquierda ) se dio el 20 de junio de 1973, durante la "masacre de Ezeiza" cuando Perón regresaba al país, en la que murieron miles de jóvenes militantes bajo el fuego cruzado de los comandos de la derecha peronista aliada a la oligarquía "antiperonista".

Perón arrasó en las urnas en las elecciones del 25 de septiembre de 1973, ganando por el 70% de los votos (al igual que Chávez en el referendo del 2004), y lo primero que hizo fue llamar a todos los sectores y partidos políticos de la derecha liberal (incluida la oligarquía golpista) para construir una pacto de "reconciliación nacional" (similar a lo que hizo Chávez tras ganar el referendo en agosto pasado).

Posteriormente, y sin la careta del discurso antiimperialista, el general  anudó "acuerdos de gobernabilidad" con el establishment económico, y expulsó a los Montoneros y a la militancia de izquierda de la Plaza de Mayo, apoyado por las tendencias más reaccionarias del sindicalismo y la partidocracia peronista aliada a los sectores del poder económico.

Luego, tras la muerte de Perón en 1974, su mujer, Maria Estela Martínez, heredó la presidencia y comenzó la represión militar contra los grupos de resistencia armada, entre ellos Montoneros, que condujo al golpe militar de marzo de 1976, el más sangriento de Latinoamérica.

Y esto nos lleva a otra pregunta:
¿que hará Chávez cuando la militancia antiimperialista bolivariana, cansada del doble discurso de su líder, gane las calles pidiendo la profundización de la revolución y el fin de la partidocracia "pactista" que rodea al presidente de Venezuela?

Ese es el verdadero punto a dilucidar, no las histriónicas "peleas mediáticas" de Chávez con el gobierno de EEUU.

Los conceptos de Petras fueron tomados de:
El presidente Chávez y el referéndum: mitos y realidades


 VOLVER A HOME

comentar esta nota

© Copyright 2003  iarnoticias.com | Derechos reservados | Director Rodrigo Guevara

 

Se autoriza el libre uso, impresión y distribución de toda la información editada, siempre y cuando no sea utilizada para fines comerciales y sea citada la fuente.

contactos@iarnoticias.com