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(IAR-Noticias)
05-Dic-05 RIA Novosti
 El jefe de las tropas coheteriles estratégicas de Rusia, Nikolai Solovtsov,
no descarta que la lista de países que tienen armas nucleares pueda ampliarse ya
en un futuro próximo, habida cuenta de que numerosos Estados aspiran a hoy a la
posesión de este armamento.
Al
intervenir en una rueda de prensa celebrada en Moscú, Solovtsov
dio a conocer a que el nuevo sistema ruso de misiles intercontinentales Topol-M
(SS-25, en la clasificación occidental, en dotación del Ejército ruso desde
1998) se va a instalar próximamente en otro regimiento de las tropas coheteriles
estratégicas, con lo cual ya serán dos las unidades militares rusas equipadas
con este arma.
Comentando los planes del recorte de misiles, Solovtsov reiteró que Rusia debe
eliminar entre 1.700 y 2.200 piezas conforme a los acuerdos internacionales, y
que la composición de las tropas coheteriles se irá adaptando a ello.
Todos los tipos de misiles, a
excepción de los Topol-M estacionados en silos o sobre plataformas móviles, van
a salir de guardia gradualmente, declaró el militar ruso.
Se contempla que a futuro Rusia va a
prestar mucha atención a los programas de modernización de los misiles: primero,
porque permite extender en un 50% o hasta duplicar la vida operativa del
armamento existente; segundo, porque implica menor coste en comparación con el
desarrollo de nuevos sistemas; y tercero, porque es políticamente cómodo, pues
no se contradice con los convenios suscritos en materia de la reducción
obligatoria de las ojivas.
Solovtsov aprovechó su comparecencia ante los periodistas para manifestar el
“categórico rechazo” de Moscú al estacionamiento de las armas en el espacio
extraterrestre.
Otro representante de la industria coheteril rusa, Yuri Solomonov, director del
Instituto de Equipos Térmicos de Moscú que promueve la creación de los misiles
estratégicos de la nueva generación, afirmó en rueda de prensa que Rusia será
capaz de dar una respuesta adecuada a cualquier desarrollo que haya en esta
materia en otros países, por ejemplo, en EE.UU.
“De aquí a diez años, podemos dormir tranquilos” – afirmó Solomonov en
referencia a los misiles Topol-M cuyos creadores tomaron en cuenta “cuanto se
había hecho a escala global en el desarrollo de las tecnologías nucleares y
sistemas antimisiles”.
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